Después de una semana bastante agitada en los medios y en las redes por el llamado primer "derbi" o ''clásico" entre los dos equipos de Barranquilla llegó el día del partido. Por un lado estaban los confiados hinchas del Junior, y por el otro los (muchos recienconvertidos) optimistas hinchas Universidad Autónoma del Caribe. El primer debate fue si el partido merecía llamarse "clásico", "derbi", o algo por el estilo. Para la Autónoma por supuesto lo era, es su primer año en la A pero jugaban con el equipo tradicional de Barranquilla, con 89 años de historia y siete veces campeón de Colombia. Después de todo, con solamente estar de tu a tu en la cancha frente a Junior, en un llamado "clásico", y hasta disputandole parte de su hinchada y hegemonía, ya era una ganancia. Por el lado del Junior jugadores y aficionados, argumentaban que un partido frente a un novato no podía llamarse "clásico", que en la costa ese lugar lo tenía ocupado el Unión Magdalena (ahora en la B) o cuando mucho el Real Cartagena (también en la B). Así confiados los hinchas de Junior esperaban una "bienvenida al primiparo", una goleada, un paseo, tres goles de Arzuaga, en fin. Los hinchas de la Autónoma en su optimismo por fuera, pero con el natural temor por dentro, querían dar el golpe, a larga sabían que tenían más por ganar que por perder.
Con una aceptable asistencia de 18,000 aficionados arrancó el partido. La Autónoma fue "vestido de frac" al "clásico", con mucha personalidad y valentía se adueñaron del balón, atacaron y crearon las mejores opciones de gol frente a un Junior en "pinta informal" que no estuvo a la altura. Junior careció de ideas, de manejo de balón, y de la seguridad en la defensa que sólo fue mitigada por el portero Viera. Junior espóradicamente y gracias a las individualidades llegaba al arco, hasta que marcó el primer gol cuando el partido estaba mejor para la U. Junior mejoró con el gol y termino dominando al final del primer tiempo.
En el segundo Junior arrancó con la misma dinámica, pero se fue durmiendo, y la U volvía a ser la del inicio del partido. La entrada de Ruíz por Jossimar, que naufrago en la cancha jugando en una posición solo entendible por el Zurdo, prometía mejorar el equipo. Pero la táctica de mandar pelotazos a Ruíz entre 3 y 4 defensores de la Autónoma, casi sin compañeros alrededor y con 4 o 6 hombres de Junior anclados en su propia mitad de la cancha tampoco fue la solución. Una descolgada de Michael Barrios, que todo el partido fue un dolor de cabeza para la defensa de Junior, provocó el penalty y la segunda amarilla de Vanegas. Gol de Alan Navarro, el conductor de la U, nada que hacer Viera. El partido pintaba para la Autónoma que se apoderó del balón con personalidad pero con precaución para atacar. Junior insistiendo en la misma formula con Ruíz estuvo a punto de marcar el segundo después que este eludiera 2 o 3 defensas en el último cuarto de cancha y dejará mano a mano a Vásquez, pero el arbitro negó la ventaja y pito una falta a Ruíz. La U se quedó con 10 también.
Así, y sin mucho más que decir, transcurrió el partido hasta el final, un Junior sin ideas y sin variantes, frente a una Autónoma valiente y ordenada. El 1-1 pareció justo para la mayoría aunque los hinchas de la Autónoma sintieron que merecieron más. Con respecto a Junior todos esperamos que con Ortega el equipo mejore, y bastante, y ojalá sea así, pero me quedarán las preguntas: es que el Junior depende de lo que haga Ortega en la cancha? y el técnico donde está?. Con respecto a la Autónoma, buen comiezo, y le deseo éxitos, a seguir firme con su meta de consolidarse en la A.