Tuesday, October 10, 2006

memorias del primer año / entrega tres


“Vas solo?”, me dijo. Naturalmente lo estaba, y ella también, pero aún así le dije: “sí, y tu?”. “También”, respondió. Entonces me senté a su lado y compartimos más de tres horas de viaje en el avión que iba de Barcelona a Estocolmo. Ella iba allí de vacaciones. Yo había estado una semana en Barcelona y ahora regresaba a Lulea haciendo escala en Estocolmo. Entre las muchas cosas que hablamos le conté como y porque había llegado a Europa. Entonces volví a recordar muy bien el día en que mi papá me dijo: “el taxi llego, vamos”. Mi mamá y mi hermana estaban listas, yo también, pero quería pasar unos minutos más en casa. Cualquiera puede pensar que da igual diez minutos más o menos después de haber vivido más de veinticuatro años allí, pero para mi no, serían los últimos en mucho tiempo, así que me los tome…
Llegamos al aeropuerto de Cartagena después de viajar dos horas por una carretera paralela a un océano que en unas horas yo atravesaría. La cuenta regresiva había empezado hace mucho, y ya estaba en el lugar de una cita en el día en que quizás una parte de mí quería ignorar que llegaría. La sala de espera de ese aeropuerto y las decenas de viajeros que iban y venían fueron los testigos de esos últimos momentos con mi familia. Allí nos hablamos, nos reímos, y recordamos gratos momentos hasta que llegara la hora de despedirnos. Allí también me liberaba de mis últimas pertenencias personales: mis llaves, mi teléfono, mi dinero, y una parte de mí que también se quedaba. Pero también otra de ellos me llevaba en un beso de mi hermana, en un abrazo de mi padre, en una bendición de mi madre, y me daban el ánimo suficiente para cruzar la puerta de un destino que apenas empezaba.

1 comment:

Anonymous said...

me encanta, primo estoy muy orgullosa de ti.....no me hubiera imaginado nunca todo lo sentiste en ese momento, debio ser un sertimiento que sale del alma muy indescriptible.- ese recuerdo siempre lo llevarás en el corazon como una de tus mejores experiencias.
Tu prima que te quiere mucho
Osiris